De vuelta de las vacaciones - Evita el estrés con estos consejos
¿Qué causa el estrés?
Independientemente de cómo vivamos nuestras vidas, el estrés físico y mental nos afecta de diferentes maneras. Plazos, relaciones, expectativas y demandas son solo algunos ejemplos de las grietas por donde se infiltra el estrés. La mejor manera de manejar el estrés es primero definirlo.
- ¿De dónde proviene?
- ¿Cómo te afecta?
- ¿Cómo reaccionas al estrés?
Es solo cuando identificamos el estrés que podemos hacer algo al respecto.
Una vida sin estrés
No vemos que aspirar a una vida completamente sin estrés sea especialmente deseable tampoco. El estrés es un fenómeno natural que surge cuando podemos mantener el control total. Si queremos seguir desarrollándonos, enfrentando desafíos y enriqueciéndonos, debemos exponernos a momentos y situaciones en los que no hemos estado antes. El estrés en sí mismo no es peligroso; es un indicador.
Equilibrio entre trabajo y descanso
Creemos que la vida se siente mejor cuando nos movemos entre el trabajo y el descanso. Cuando la necesidad del cuerpo de movimiento y desafío culmina en recuperación y descanso. En este movimiento surge el equilibrio. Se trata de cambiar el enfoque y pasar de esforzarse, estirarse y crear a soltar, dejar ir y observar.
Cómo manejar el estrés
La mejor manera de manejar el estrés, creemos, es aceptar ambas partes de uno mismo: la activa y la pasiva. El cuerpo a menudo es más simple de lo que pensamos. Nos avisa cuando está cansado, al igual que señala cuando necesita actividad, o al menos debería tenerla. Si nos tomamos el tiempo para escuchar estas señales, podemos mantener mucho más fácilmente el equilibrio que necesitamos.
El objetivo del equilibrio
Alcanzar el equilibrio no es un punto final, sino un proceso continuo. Cuando trabajamos activamente en el equilibrio mental y físico, trabajamos de manera constructiva con nosotros mismos. Entonces creamos buenas condiciones para todos los aspectos de la vida. Una acción para el equilibrio puede ser cualquier cosa, desde una larga noche de sueño después de una semana laboral dura hasta llegar a casa y salir a correr después de un día físicamente inactivo.
Encuentra tiempo para ti mismo
Como se mencionó, necesitamos tiempo con nosotros mismos para entender nuestras necesidades. De lo contrario, el cerebro simplemente sigue funcionando, y el cuerpo tiene que seguir el ritmo lo mejor que pueda. Tómate tu tiempo. Aquí hay algunos consejos sobre lo que normalmente hacemos para equilibrar la vida cotidiana.
- Un paseo tranquilo. Preferiblemente sin música ni otras distracciones. Un paseo solo puede ser justo la estimulación adecuada para la mente y el cuerpo sin que ninguna de las partes se canse, mientras ambas disfrutan de un momento de recuperación activa.
- Estiramientos suaves. Sin exigencias, sin dolor. Imagina cómo se estira un gato: suavemente y con sensibilidad. El yoga y los estiramientos funcionan muy bien para calmar la mente.
Cómo encuentras mejor la calma es un viaje personal de descubrimiento. ¿Qué funciona para ti?